Alcachofa para adelgazar

Alcachofa para adelgazar

¿Os encontráis ya en plena ‘operación bikini’? La alcachofa para adelgazar puede ser una gran aliada, que acompañe una alimentación equilibrada y sostenible y combinada con ejercicio físico. ¿Sabéis por qué?

Como alimento vegetal, con pocas calorías (prácticamente libre de grasa), rico en vitamina C, hierro, potasio, magnesio, fibra y folato, es “un alimento muy útil en las programaciones nutricionales y dietas bajas en calorías”, según indica Diego E. Moreno, investigador del Laboratorio de Fitoquímica del Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de CEBAS-CSIC.

 

La alcachofa en general y los suplementos vegetales con esta verdura en particular se consumen en gran cantidad en toda la Unión Europea, sobre todo, cuando se persigue estar a dieta y perder peso. De hecho, está entre los diez principales ingredientes para acabar con el sobrepeso y la obesidad, junto con el helecho, la piña, el té verde o la papaya, según los estudios recientes.

Principalmente es efectiva en el tratamiento de la hiperlipidemia (colesterol alto), en la protección del hígado y de la vesícula biliar (tanto la alcachofa como sus hojas) y en la eliminación de colesterol, que se ha demostrado por diferentes mecanismos en el organismo, “aunque se necesite siempre más investigación en adultos humanos, para explicar mejor estos mecanismos”, como indica Moreno.

 

La alcachofa es muy rica en cinarina (dicafeoilquínicos) y en clorogénico (cafeoilquínico), derivados naturales de ácido cafeico, presentes en altas cantidades en la alcachofa y en el cardo. Además, estas sustancias son beneficiosas para reducir la oxidación del LDL (colesterol malo) y aumentar la termogénesis (producción de calor del organismo), así como para el metabolismo lipídico en general.

 

También es importante tener en cuenta la manera en la que cocinamos esta verdura para que, además de que se consuma de manera deliciosa, no pierda nutrientes y ayude a mantener la línea.

 

Como en otros casos de hortalizas ricas en fitoquímicos con potencial saludable, el exceso de cocción, tanto por tiempo como por temperatura, perjudica a estos compuestos beneficiosos, por lo que la preparación al vapor, con microondas (pocos minutos y poca o ningún agua añadida), el hervido (pero escasos minutos) o recetas que impliquen poco proceso (tortillas, por ejemplo) son métodos eficaces y suficientes para elaborarlas.