« Hay una creciente conciencia sobre la importancia de la alimentación »

Belén García Tinajo (Tomelloso, 1993) es graduada en Nutrición Humana y Dietética y especializada en salud hormonal femenina y patologías digestivas. Aficionada a la cocina, la lectura y disfrutar de la naturaleza, a través de sus perfiles en Instagram y TikTok, donde cuenta con miles de seguidores, comparte sus recetas. En esta entrevista nos habla de cómo es su trabajo, recalca que “la alimentación es un pilar fundamental de nuestra salud”, desvela cómo son sus hábitos alimentarios y se rinde ante las alcachofas. “Son súper saludables, muy versátiles en la cocina y una gran fuente de fibra que ayuda a la digestión”.  

¿Cuándo y qué te empujó a estudiar Nutrición Humana y Dietética?

Siempre quise estudiar una carrera sanitaria, en concreto Medicina. Cuando llegó el momento no tenía nota suficiente y puse varias opciones entre ellas Farmacia y Nutrición Humana y Dietética que llevaba rondándome la cabeza un tiempo. Me llamaron primero para entrar en Farmacia así que cursé el primer año, aunque pronto me di cuenta de que no era lo que esperaba y al año siguiente me cambié a Nutrición.

En Instagram, donde eres muy activa, te presentas como “nutrición clínica, problemas digestivos y salud femenina. Vida saludable, flexible y recetas fáciles. Consultas online y presencial”. ¿Nos puedes detallar a qué perfil de pacientes te diriges?

Mi enfoque en nutrición está dirigido a personas que buscan mejorar su salud a través de la alimentación, con especial atención a tres o cuatro áreas clave: nutrición clínica, problemas digestivos y salud femenina y la recomposición corporal. Trabajo con pacientes que tienen patologías digestivas como colon irritable, SIBO o disbiosis intestinal, ayudándoles a mejorar su sintomatología mediante una alimentación adaptada. También acompaño a mujeres en diferentes etapas de su vida, desde la regulación hormonal hasta la fertilidad, el embarazo o la menopausia. Todo esto lo combino con una visión de vida saludable y flexible, donde la alimentación no sea una fuente de estrés sino de bienestar. Me gusta compartir recetas fáciles y equilibradas para que mis pacientes disfruten del proceso sin sentir que están en una dieta restrictiva.

Atiendes de forma presencial y online, ¿cómo pueden contactarte?

Pueden contactarme a través del formulario que aparece en el enlace que tengo puesto en el perfil de Instagram o por correo electrónico directamente.

En general, ¿crees que en nuestro país nos alimentamos bien?

Depende de cómo lo miremos. En nuestro país tenemos una base dietética muy buena, con una tradición culinaria basada en la dieta mediterránea, que es una de las más saludables del mundo. Sin embargo, en la práctica, el patrón de alimentación ha cambiado en los últimos años, y cada vez consumimos más productos ultraprocesados, azúcares añadidos y grasas de mala calidad, mientras que hemos reducido el consumo de frutas, verduras y legumbres. Otro problema es el ritmo de vida actual, que hace que muchas personas opten por soluciones rápidas en lugar de cocinar en casa con ingredientes frescos. La falta de educación nutricional también influye en las elecciones alimentarias, lo que se traduce en problemas de salud como el sobrepeso, la obesidad y enfermedades metabólicas. Aun así, veo que hay una creciente conciencia sobre la importancia de la alimentación, y cada vez más personas buscan información y herramientas para mejorar su dieta. La clave está en encontrar un equilibrio: disfrutar de la comida sin caer en excesos y fomentar hábitos saludables a largo plazo.

 
Dices: “La cocina es un arte y la comida está para disfrutarla sin culpa”. ¿A qué te refieres?

Cuando digo que la cocina es un arte, me refiero a que la alimentación no debería ser solo una cuestión de nutrientes y calorías, sino también de creatividad, placer y conexión con los alimentos. Cocinar es una forma de expresión, de experimentar con sabores, texturas y colores, y de cuidar de nosotros mismos y de los demás. Por otro lado, la comida está para disfrutarla sin culpa porque la alimentación no debe ser una fuente de ansiedad o restricción extrema. Muchas veces se nos inculca la idea de que ciertos alimentos son ‘buenos’ o ‘malos’, y esto puede generar una relación poco saludable con la comida. Creo en un enfoque flexible y equilibrado, donde se pueda disfrutar de una alimentación nutritiva sin prohibiciones ni sentimientos de culpa. Comer bien no significa renunciar al placer de la comida, sino encontrar una forma de hacerlo que nos haga sentir bien tanto física como emocionalmente.

 
En nuestro blog hemos entrevistado a varios colegas tuyos de profesión y la mayoría, si no todos, son partidarios de que la nutrición sea una asignatura obligatoria en las escuelas. ¿Estás de acuerdo?

Sí, estoy totalmente de acuerdo. La alimentación es un pilar fundamental de nuestra salud, y enseñar buenos hábitos nutricionales desde la infancia puede marcar una gran diferencia en la prevención de enfermedades a largo plazo. Si los niños aprenden desde pequeños a hacer elecciones alimentarias saludables, será mucho más fácil que las mantengan en su vida adulta. Además, en un mundo donde la industria alimentaria nos bombardea con productos ultraprocesados y mensajes confusos, tener una base de educación nutricional ayudaría a que las personas sean más críticas con lo que consumen. No se trata solo de aprender qué alimentos son más nutritivos, sino también de desarrollar habilidades prácticas, como leer etiquetas, planificar comidas equilibradas y entender la importancia del equilibrio sin caer en extremos. Creo que, si la nutrición formara parte del currículo escolar, podríamos ver un cambio positivo en la salud de las próximas generaciones.

Te leemos: “me encanta cocinar, comer y disfrutar de lo que como y por ello intento variar mi alimentación con recetas nuevas y variadas”. Muchas las compartes en tus redes sociales. ¿Cuáles son las que tienen mayor impacto?

Las recetas que suelen tener mayor impacto en mis redes son aquellas que combinan sencillez, sabor y un toque innovador. A la gente le encantan las ideas rápidas y fáciles, pero también disfrutan cuando les muestro formas diferentes de preparar ingredientes cotidianos. Por ejemplo, tienen mucho éxito las cenas que se pueden preparar en poco tiempo. Al final, creo que lo que más gusta es la idea de comer rico sin complicaciones y sin sentir que se está ‘a dieta’.

¿Cómo se alimenta Belén? Es decir, ¿haces tres o más comidas al día?

Mi alimentación es bastante flexible y se adapta a mis necesidades y ritmo de vida. No sigo un esquema rígido de comidas, sino que escucho a mi cuerpo y ajusto según el día. Por lo general, hago tres comidas principales y, si lo necesito, añado alguna merienda o snack. Me gusta empezar el día con un desayuno nutritivo, que puede ser desde un bowl con kéfir, fruta y frutos secos hasta unas tostadas con aguacate y huevo. El almuerzo y la cena los varío bastante, pero siempre intento que sean equilibrados y apetecibles. De hecho, mi alimentación es prácticamente como lo que muestro en Instagram. Me gusta compartir lo que realmente como en mí día a día para dar ideas y demostrar que se puede llevar una alimentación saludable. Disfruto mucho cocinando, probando recetas nuevas y combinando ingredientes de forma creativa para que comer bien sea siempre algo placentero y sostenible en el tiempo.

¿Qué es lo que nunca falta en tu menú y lo que nunca está?

Nunca faltan alimentos frescos y de calidad. Siempre incluyo frutas, verduras, fuentes de proteína como huevos, pescado o legumbres, y grasas saludables como frutos secos, aguacate o aceite de oliva virgen extra. También me encanta variar los cereales, combinando opciones como arroz, gnocchis o pan integral. Por otro lado, lo que nunca está en mi menú son las carnes rojas, pero principalmente porque no me gustan. Del resto de alimentos creo que como casi de todo e intento variar.

No podemos dejar pasar la oportunidad de preguntarte por las alcachofas. ¿Te gustan?

¡Sí, me encantan las alcachofas! Además de ser un alimento súper saludable, me parecen muy versátiles en la cocina. Me gusta prepararlas de diferentes maneras: cocidas, salteadas, en pizza o incluso en ensaladas. Además, son una gran fuente de fibra y ayudan a la digestión, así que siempre que puedo las incluyo en mi alimentación.

¿Las recomiendas a tus pacientes?

Sí, creo que muchas veces no se les saca todo el partido que tienen y animo a la gente a probar diferentes formas de cocinarlas porque realmente pueden ser deliciosas.

¿Qué alimentos nunca faltan en tu despensa?

En mi despensa nunca faltan alimentos que me permitan crear platos equilibrados y nutritivos. Siempre tengo una buena variedad de granos integrales en vasitos como arroz integral y quinoa, que son excelentes fuentes de fibra. También suelo tener legumbres en conserva, que son una opción práctica y rica en proteínas vegetales. No me faltan algunas verduras en conserva como las alcachofas o las judías verdes. Y por supuesto, siempre tengo conservas de pescado como atún, sardinillas o melva.

Muchísimas gracias por tu tiempo.

A vosotros. Ha sido un placer.

Entrevista realizada mediante cuestionario por escrito. Desde la asociación sin ánimo de lucro Alcachofa de España agradecemos a Belén la atención prestada. La fotografía que ilustra el artículo ha sido facilitada para esta ocasión por la entrevistada.