5 curiosidades sobre la planta de la alcachofa
El consumo de alcachofa suele promoverse mediante argumentos nutricionales o de salud, gracias a que esta verdura, considera ‘superalimento’, aporta innumerables beneficios a nuestro organismo. Se habla de la alcachofa por cómo ayuda a reforzar nuestra dieta pero no tanto por sus características, y en este texto vamos a tratar de solucionar esa carencia. A continuación van algunas curiosidades de la planta de la alcachofa:
Cada planta puede llegar a vivir unos cuatro o cinco años (máximo). Es una planta perenne y vivaz, de modo que vive varios años gracias a su sistema radicular, formado por un rizoma muy desarrollado.
La planta de la alcachofa se reproduce mediante renuevos o tallos, es decir, a partir de los vástagos desarrollados en la parte inferior del vegetal. Tiene tallos gruesos y largos de hasta 2 metros de altura y es en su punta donde nacen las alcachofas.
La alcachofa pertenece a la familia de los cardos, mientras que su fruto es en realidad una flor comestible y desarrollada en el interior del bulbo, también llamado corazón, que es la parte más tierna y sabrosa del vegetal Cynara.
Cuando se deja en la planta que crezca salvaje y sin cortar, de manera envolvente acaban floreciendo unas hojas duras y protectoras que se conocen con el nombre de brácteas o pencas, adquiriendo éstas un color violáceo que recuerda al de la flor del cardo.
La alcachofa está triunfando en el campo de las bebidas: además de los sabrosos platos, con este vegetal se están elaborando numerosas cervezas artesanales con base de alcachofa, caso de la Cacho Beer de Tudela o la Badúm de Peñíscola, de la que ya dimos cuenta en este blog. Son solo dos ejemplos, pero hay muchas más cervezas creadas a partir de este este vegetal.
Ahora conoces más detalles de esta exquisita y nutritiva planta, pero seguro que todavía puedes descubrir muchas más curiosidades. Si quieres añadir alguna, puedes hacérnoslo saber en nuestras redes sociales y nosotros la añadiremos gustosamente a la lista 🙂